Breaking News

CULTURE SHOCK: Terror migratorio en la Era Trump



CULTURE SHOCK
(Gigi Saul Guerrero, 2019)
Episodio 10 de la serie antológica INTO THE DARK

La serie antológica INTO THE DARK, coproducción ente Hulu y Blumhouse que comenzó a transmitirse en Octubre del año pasado, tenía un concepto interesante. Sería un compilado de 12 episodios, cada uno diferente al otro y que tocarían el tema de alguna festividad según el mes en el que se transmitían.

Asi, el primer episodio hablaría de Halloween, el segundo se situaría en la fiesta de Acción de Gracias, el tercero en Navidad, en fin. La idea era esa, tomar una festividad del mes, dar el tema al director y que con base a los relatos escritos por los colaboradores, imprimiera ese sello único en el capítulo.

Aunque la idea sonaba bien, los resultados han sido muy irregulares. Ni la crítica ni la audiencia está realmente convencida de la calidad de la propuesta. Y es que salvo un par de episodios (como el dirigido por Nacho Vigalondo, Pooka), la calidad ha sido bastante mala, muy de serie b y sin tanta propuesta arriesgada.

Llegando al episodio 10 y justo para anti celebrar la festividad del 4 de Julio en los Estados Unidos, el proyecto cae en manos de una directora que, siendo cofundadora de la casa productora LuchaGore y una visión particular acerca del terror/horror, se ha ganado el respeto del gremio del género, considerándola una promesa dentro del terror latinoamericano. Ella es Gigi Saul Guerrero, mejor conocida como La Muñeca del Terror.

Con proyectos destacados en el género, más que nada en cortometrajes como El Gigante (2014), el segmento Día de los Muertos en la antología mexicana de horror llamada México Bárbaro (2014) y su miniserie ganadora en el Festival Mórbido del Premio del Público titulada La Quinceañera (2017), Saul Guerrero poco a poco se ha consolidado como una voz en el mundo del terror latino de la actualidad.


En esta oportunidad que le da Blumhouse en esta serie antológica, Gigi aprovecha ese tema del choque cultural, el cual ella ha vivido personalmente al pasar de crecer y criarse en la Ciudad de México a vivir actualmente en Vancouver, Canadá, para arriesgarse a entregar un largometraje que se atreve a tocar temas actuales y sensibles de la migración y el trato que se le da a los mexicanos (y compañeros de otras naciones centroamericanas) en la frontera sur de los Estados Unidos de Trump.

La historia, coescrita entre Saul Guerrero, Efren Hernández y James Benson, nos pone en la vida de Marisol (Martha Higareda), una mexicana que, como muchos, quieren cruzar la frontera e ir en busca del tan sonado Sueño Americano. Sin embargo, las cosas no resultan tan sencillas ni bonitas, así Marisol se ve sumergida en una espiral donde más que ser partícipe de un sueño resulta víctima de las peores pesadillas americanas.

Esta cinta/episodio de hora y media de duración toma varios temas de actualidad. De entrada la problemática fronteriza, donde en el primer acto nos muestra la crudeza y el terror que los migrantes sufren al ser mal tratados, abusados o explotados por los famosos "coyotes" que más que ayudar buscan siempre sacar provecho de la situación. En este punto, vemos a una Marisol que ya ha intentado ir tras ese sueño de cruzar al otro lado con resultados nada agradables, por lo que al conocer a un par de personajes como el niño Ricky (Ian Inigo) y el intimidatorio Santo (Richard Cabral), la sensación de los miedos que uno enfrenta al cruzar ilegalmente la frontera dan otras perspectivas.

El segundo acto es totalmente diferente. Incluso en su paleta de colores, antes oscuros con luces rojas brillantes y una opacidad en la imagen, se torna brillante, con colores pastel, una sensación de limpieza y pulcritud bárbara donde se asume que Marisol ha llegado a los EEUU a cumplir y vivir el sueño. Sin embargo, no todo lo que brilla es oro y la apariencia de perfección se va desluciendo hasta entrar en el tercer acto, donde el giro nos muestra la amarga verdad del destino de los migrantes ilegales.


Enriquecida con actuaciones como la de la leyenda del terror ochentero Barbara Crampton (ReAnimator, 1985; From Betond, 1986), un Shawn Ashmore cumplidor y una Higareda que funciona bien en su papel de Marisol, Culture Shock nos lleva a ver cómo el deseo del Sueño Americano se convierte en algo atroz. Explotando la festividad estadounidense por excelencia (el 4 de Julio), lo vivido por Marisol y compañía se convierte en un viaje de terror social que toca fibras sensibles por su actualidad.

Como buena producción de Blumhouse, se nota el no tan alto presupuesto en la producción, mostrándonos un episodio que no está carente de detalles no tan buenos como el ritmo del episodio que puede tornarse pesado, algunos detalles en la edición del mismo pero que resulta destacado por su mensaje y crítica a la actualidad de la situación migratoria en la frontera sur de los Estados Unidos. La separación de los hijos a sus padres por no tener documentos, el hecho de tener encerrada a la gente como ganado y decir en alguna línea del episodio que a nadie le importa lo que pase con ellos, claramente es el punto más fuerte de Culture Shock.

Sin duda Gigi Saul Guerrero hace una labor interesante en el episodio, donde se nota su influencia y sello tex mex pero lo lleva a niveles de terror psicosocial dando guiños al cine de Jordan Peele sin ser tan sutil, sino más directa con su mordacidad en temas que parece que el público tanto latino/mexicano como estadounidense pareciera ignorar deliberadamente. 

Además, se nota una clara evolución en la directora, dejándonos con ganas de verla pronto en un largometraje que tenga mayor presupuesto o un alcance mayor en cines.
Es por esa trascendencia actual y arriesgada que Culture Shock, décimo episodio de esta antologia de terror de Hulu y Blumhouse, se gana un lugar de honor en la misma, ya que nos mete de lleno a esta pesadilla que muchas veces resulta ser el tan gastado Sueño Americano.

Calificación: 8.0 / 10

Con guiños al horror clase b, Gigi Saul Guerrero reafirma su labor como una de las nuevas voces del terror latinoamericano haciendo una obra que puede resultar incómoda, trashy pero llena de temas actuales que no pueden dejar de sonar en plena era Trump.

-Aj Navarro



No hay comentarios.